El Águilas Fútbol Club empató a cero ante el Club Atlético Antoniano Grupo Velázquez en el encuentro disputado ayer en el Estadio Municipal de Lebrija y correspondiente a la 17ª jornada del campeonato (la última de la primera vuelta) en el Grupo IV de Segunda Federación. Los blanquiazules, de esta manera, despiden el año natural con un punto muy meritorio y que, incluso, se quedó corto si atendemos a las ocasiones contabilizadas por ambos equipos y al buen segundo tiempo que firmaron los nuestros.
El 2024, al menos en lo que atañe al Águilas Fútbol Club a nivel competitivo, ya es historia. La entidad afronta, ahora, los ilusionantes retos que trae consigo el nuevo año futbolístico. Primero, con un mercado de invierno en el que debe suplir las dos bajas anunciadas hace unas semanas y las que pudieran ir surgiendo a lo largo de los próximos días. Y, en segundo lugar, con la mitad que aún le resta al campeonato. La noticia más esperanzadora a este último respecto es, sin lugar a dudas, el mes de diciembre: con un 8 de 12, rubricado con un empate que debe valorarse en la medida justa para un campo en el que nadie ha ganado desde hace ya más de un año. Y los nuestros, cabe decir, estuvieron por momentos muy cerca de conseguirlo.
Tropi, por ejemplo, estrelló una pelota contra la madera en una primera parte en la que, todo hay que decirlo, no ocurrió mucho más. Tan sólo su obús a la escuadra (Diego Barrios también metió con acierto la manopla para evitar el tanto) y una ocasión de Mike Cevallos apenas un minuto después amenazaron con romper la igualdad que imperó hasta el descanso.
El regreso de vestuarios, no obstante, trajo consigo un partido sustancialmente distinto. El Águilas no necesitó cambiar demasiadas piezas para ser mejor que el Antoniano en el tramo inicial del segundo tiempo. Durante cerca de 25 minutos, los blanquiazules (ayer, de negro, granate y dorado) se hicieron dueños del balón y encadenaron una serie de acercamientos peligrosos que, en algunos casos, se tradujeron en ocasiones sobre la portería que el ya citado Diego Barrios defendió con acierto. Pelón, Kensly Vázquez y Sergio, que volvió a jugar semanas después, protagonizaron las más claras.
El partido, eso sí, volvió a equilibrarse en su recta final. No es que el Antoniano renunciase a su idea de fútbol (tan sencilla como efectiva, vistos los resultados hasta la fecha) o bombardease el área visitante, si bien la sensación es que a los hombres de Fran Alcoy ya se les había pasado ese clímax que, a veces, te parece llevar hacia la victoria. Y no pasa nada por admitir que, a esas alturas de la tarde, valorar el empate se sentía como la opción más sabia. Ya conocen ese tópico tan repetido en el mundo del fútbol: “no pierdas en un minuto lo que no has sido capaz de ganar en 90”. Pues básicamente es lo mismo. Y si no, que se lo digan al Barça en su duelo por el liderato ante el Atlético de Madrid. Porque el Águilas sumó tan sólo un punto, sí, pero ese punto puede ser de partida, si miramos con ilusión a lo que está por venir. ¡Felices fiestas a todos y ojalá que el 2025 traiga todas las alegrías que no pudimos celebrar en este 2024!
