El Águilas consiguió ayer su segunda victoria del curso (la primera en casa) tras vencer por dos goles a cero al Club Deportivo Marchamalo en el partido disputado en el estadio de El Rubial. Los blanquiazules, que se mostraron muy superiores a su rival durante la mayor parte del encuentro, sufrieron en el tramo final y no encontraron la sentencia hasta el descuento.
Arrancó el equipo alcarreño con la idea de hacer daño el máximo daño posible en un sentido puramente deportivo. Tanto que hasta en el saque inicial pusieron a prueba los visitantes la concentración de Iván Buigues. Fueron cinco minutos de empuje por parte del Marchamalo que acabaron abruptamente con la primera ocasión clara para el Águilas: un balón despejado sobre la línea de gol cuando se colaba en la portería de Jony. A partir de ahí, los blanquiazules se apropiaron de la pelota y, con paciencia, fueron cocinando el primer gol.
Hubo ocasiones antes, sí. Y algunas muy claras, como un disparo de Barrenetxea que lamió el palo. Sin embargo, hubo que esperar hasta el 42’ para que la pelotita entrase. Rafa Chumbi, en una gran acción personal, se inmiscuyó en el área y sacó un centro raso que Cellou, en su primer partido como titular, empujó con violencia a la red. Era el 1-0 con el que se llegaría al descanso, fundamentalmente porque la cabeza de un defensor visitante evitó que Toni Jovic, en una vaselina que superó la salida del portero rival, ampliase distancias en el añadido.
La segunda mitad empezó igual que acabó la primera: con un Águilas arrollador que no tenía la más mínima intención de volver a sufrir para mantener los tres puntos. Ni dos minutos habían pasado desde la reanudación cuando Pedro Torres, en la rúbrica de una elaborada jugada colectiva, estrelló la pelota contra la madera. Ramón Arcas en una acción dentro del área, Mike Gaffoor con un disparo de media distancia o Rafa Chumbi fueron los protagonistas de las ocasiones más claras que el Águilas acumuló en los siguientes minutos. Especialmente clara fue la de este último, quien sufrió una mano milagrosa de Jony y vio cómo el guardameta alcarreño le privaba de anotar un gol que ya se celebraba en la grada de El Rubial.
El Marchamalo, como era de esperar, apretó en los minutos finales. Y al Águilas, en consecuencia, le tocó sufrir. Lo hizo ante el Mancha Real y cedió un empate; y también ante el Toledo, si bien allí la defensa se convirtió en una muralla que resistió caballos de potencia. Esta vez, los blanquiazules dieron un paso más y acabaron encontrando -aunque en el descuento, todo sea dicho- el premio de la sentencia. Era el minuto 92’ cuando Mounir, como broche a una actuación personal de notable alto o incluso sobresaliente, dirigió una contra que él mismo se encargó de finalizar con un zapatazo inapelable a la escuadra de la portería. 2-0 pues para un Águilas que ya suma siete de nueve puntos posibles y que visitará Granada consolidado en la parte alta de la clasificación y compartiendo liderato con Hércules, Real Murcia y Mancha Real.
FICHA TÉCNICA
Águilas F.C.: Iván Buigues, Javi Pérez, Mike Gaffoor, Uri, Mounir, Ramón Arcas, Barrenetxea (Carlos López, 77’), Pedro Torres (Pablo, 88’), Cellou (Abel, 65’), Toni Jovic (Rober, 77’) y Rafa Chumbi (Kalu Uche, 88’).
C.D. Marchamalo: Jony, Carpin, Rafa, Illana, Fane (Peñalvo, 61’), Del Amo (Migallón, 72’), Molina (Nachete, 45’), Braun, Mani, Alvarito (Josemi, 72’) y Jacobo Alcalde (Juan Rojo, 61’).
Equipo arbitral: Ruiz Aguilera, Díaz Paredes y Fernández Moral, del colegio andaluz.
Goles: Cellou (41’) y Mounir (92’).
Tarjetas amarillas: Mani (37’), Jony (66’) y Nachete (92’).
Incidencias: disputado ante unos 1000 espectadores.
Fuente: Águilas FC