La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado la operación ‘Cala’, una investigación encaminada a perseguir el furtivismo, que se ha saldado con la investigación de un vecino de Águilas que ha sido sorprendido mientras capturaba aves fringílidas en un paraje del municipio aguileño.
Tras la operación, los guardias civiles del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) han investigado al cazador furtivo, al que se le ha instruido diligencias como presunto autor de delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos y se le ha denunciado por varias infracciones a la normativa de caza.
En el marco del ‘Plan de acción español contra el tráfico ilegal y el furtivismo internacional de especies silvestres’, guardias civiles del SEPRONA establecieron una serie de servicios para prevenir y perseguir el furtivismo en el término municipal de Águilas.
A finales del pasado mes de septiembre, en uno de estos servicios planificados en un paraje del municipio aguileño, la Benemérita detectó a un hombre en actitud sospechosa de realizar actividades ilícitas relacionadas con la caza.
Los guardias civiles hicieron un seguimiento sobre el sospechoso que les llevó hasta una parcela de grandes dimensiones. Éste se tumbó en el suelo y se ocultó con una pantalla vegetal elaborada artesanalmente a tal efecto.
Los efectivos del SEPRONA, una vez en el lugar, comprobaron que el sospechoso tenía en sus manos una cuerda para accionar una red de libro instalada a unos 15 metros de su posición. Al llegar a su altura y éste detectar la presencia policial se incorporó y comenzó a alejarse del aguardo en dirección a un ciclomotor que había estacionado en las inmediaciones.
Una vez identificado y tras obtener todos los indicios necesarios, la Guardia Civil aprehendió los medios empleados para la caza e investigó al vecino de Águilas, al que se le ha instruido diligencias como presunto autor de delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos.
El Código Penal, en su artículo sobre delito relativo a la protección de la flora y la fauna, establece penas de prisión de 6 meses a 2 años o multa de 8 a 24 meses y, en todo caso, la de inhabilitación especial para profesión u oficio e inhabilitación especial para el ejercicio del derecho a cazar o pescar por tiempo de uno a tres años.
El investigado, junto con las diligencias instruidas y los objetos incautados, ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Lorca (Murcia).
Fuente: Dirección General de la Guardia Civil