Las generaciones actuales de aguileños retienen en la memoria el incendio del balneario España, ocurrido hace más de un siglo, un suceso que conmovió a los hombres de la época.
Durante la última década del Siglo XIX y principios del Siglo XX, con la construcción del ferrocarril (1890), Águilas se convirtió en un importante destino de veraneo, abriéndose distintos establecimientos de recreo como distracción para los numerosos visitantes. El más destacado sería el Balneario Niagara, instalado en la playa de Poniente, tras aprobarse la concesión de la licencia por la autoridad de Marina al empresario cartagenero D. José María Albadalejo, siendo ratificada por el consistorio local el 19 de Diciembre de 1890.
La elección del lugar se debió, principalmente, a que en la bahía de Levante había una continua actividad comercial y portuaria, haciéndose conveniente una ubicación en un emplazamiento distinto. Luis Díaz apunta que la madera empleada para la construcción del balneario la proporcionó el industrial local Antonio Chapapría, dueño de un aserradero, quien depositó dichas maderas en el lugar de la construcción.
Las Provincias de Levante 16/5/1891
Dicen de Águilas que ya se están; preparando las maderas para la construcción del nuevo balneario que se ha de instalar en aquella playa de Poniente, esperándose que en la semana entrante darán comienzo las obras necesarias para la implantación.
La autorización la concederá el Gobierno ese mismo mes, iniciándose las obras con diligencia.
Las Provincias de Levante 13/6/1891
Ya han comenzado en Águilas las obras para la instalación del Balneario, en la orilla de la playa del puerto de poniente.
El concesionario se propone terminarlo en un breve plazo.
Algunas de las casetas serán utilizadas para baños calientes con agua de mar.
El acto de inauguración será un importante evento que reunirá a la sociedad del momento.
Las Provincias de Levante 13/7/1891
Nuestro corresponsal en dicho punto, nos ha trasmitido esta mañana el siguiente:
A las 8,15
Ayer tarde se verificó la inauguración de este magnífico balneario, el cual fue bendecido solemnemente.
Por la noche estuvo aquel iluminado a la veneciana, presentando un sorprendente y vistoso golpe de vista.
En el salón se verificó un animado baile, que fue favorecido por numerosas parejas y por una gran concurrencia.
El nuevo balneario es proclamado por todos cuantos lo visitan como el primero del Mediterráneo, por sus condiciones de comodidad y solidez.
Después de la guerra hispano-americana (1898), el balneario cambió de nombre, quitándosele la referencia de un elemento geográfico estadounidense como es Niágara para ponerle el patriótico España. Las instalaciones se ampliaron con la construcción de un teatro anexo que fue inaugurado en Agosto de 1905 donde no faltarían números de variedades populares de principios del Siglo XX, llegando a actuar la célebre cupletista Fornarina. También funcionaría como sala de cinematografía.
Los dos edificios desaparecerán a causa de un voraz incendio originado por un cortocircuito, producido por las lluvias de la noche anterior y la deficiente instalación eléctrica, extendiéndose posteriormente al resto del balneario, no pudiendo hacerse nada por salvarlo. Incluso en las fachadas cercanas se echaron cubos de agua, por el temor de que se quemaran. El pueblo entero asistirá para intentar sofocarlo, viendo impávido como acaecía el desastre. Para esa noche, Felipe Palacios apunta que estaba anunciada la compañía de Asunción Pastor con la puesta en escena de “La princesa del dólar” y la “Gatita Blanca”, no apta para menores. La prensa local informará en primera plana de la noticia, en una interesante crónica del suceso.
Vida Aguileña 1/4/ 1913
Teatro y Balneario España, han sido devorados por las llamas. No han ocurrido desgracias personales.
A esto de las 12 y 30 del día 26 del pasado Marzo, la gente en tropel, corría por las calles en dirección al Puerto de Poniente, dando la voz de ¡fuego¡, a las vez que las campanas lo anunciaban.
Seguimos a la muchedumbre y nos personamos en el lugar del suceso.
En efecto era el magnífico Balneario España, que empezaba a ser devorado por las llamas.
Como empezó
Estando ensayando la compañía de Opereta y Zarzuela que dirigen los Sres. Moreno y Lucas, se notó, que uno de los telones empezaba a arder.
Se hicieron miles de esfuerzos para para extinguir el fuego, que resultaron infructuosos.
El fuego se propaga
El fuego se extendía cada vez con más rapidez, pues los vientos reinantes del Sur y Sudeste le protegían en su empresa exterminadora, dando lugar a que el suntuoso Balneario que estaba fusionado al Teatro fuese pronto destruido por las gigantescas llamas.
Todos los esfuerzos que con heroísmo el público hacia para evitar que el fuego se propagase al Balneario, fueron infecundos; las llamas acabaron por convertir en cenizas aquellos dos magníficos edificios, quedando solo los raíles que le servían de base.
Profundo sentimiento
Del innumerable público que presenció el terrible suceso, salían frases de sentimiento; pues todos vimos perecer aquellos hermosos edificios que en tiempo de verano nos aliviaban del monótono calor, dándonos en cambio, un estar delicioso.
Motivos del siniestro
Corre el rumor, de que las causas del incendio fueron el haberse formado un cortocircuito en la instalación eléctrica del Teatro España, y que por efecto de la lluvia de la noche anterior, se había humedecido el cable.
Pérdidas Producidas
Ha ocasionado grandes pérdidas, en particulares y empleados de ambos edificios. La mayor, ha sido a la compañía de los Sres. Moreno y Lucas, que se han quedado sin la mayor parte del vestuario.
Están asegurados
Nos afirman que ambos edificios se hallan asegurados en la cantidad de 125.000 pesetas.
Acto plausible
Con objeto de atenuar en algo, las pérdidas sufridas por la compañía que en el Teatro España actuaba, se organizó por varios jóvenes de esta localidad, una magnífica función teatral compuesta de dos preciosas obras que fueron interpretadas por dicha compañía.
La referida función tuvo lugar en el Salón Ideal, que el Sr. Torrecillas cedió gustoso y desinteresadamente.
El lleno fue completo a pesar de los precios excesivos. Esto demuestra; las muchísimas simpatías de que goza la susodicha compañía.
Rumores
Corren rumores, de que para el próximo veranó, quedará construido un nuevo Balneario en mejores condiciones que el anterior; pues, un establecimiento de esta clase, es de gran necesidad para Águilas, en donde afluyen un gran número de bañistas.
De ser así, no habrá que lamentar tan profundamente las pérdidas sufridas. Igualmente se dice del Teatro.
Esperamos quede convertido en realidad, lo que solo hoy es comentario, Y, de este modo Águilas conservará su atractivo veraniego.
Apunte retrospectivo
En el año 1891, fue construido en la deliciosa playa de Poniente, que baña el Mediterráneo, un bonito y grandioso Balneario, que fue siempre conocido por sus inmejorables condiciones.
En él, teníamos· un espacioso comedor, baños medicinales de agua templada y cuánto se puede exigir a un establecimiento de esta índole.
Su estancia era apetecida por cuantos le conocían, pues en él, encontrábamos un recreo encantador, dado lo pintoresco del mismo y confortable de la instalación.
En el año 1905 y para darle más aliciente al Balneario, se construyó, unido a éste, un espacioso Teatro, por el que han desfilado las mejores compañías de drama y zarzuela e innumerables artistas de gran fama que le supieron dar nombre.
Lo que hace falta
Precisa la formación de un cuerpo de bomberos que conserve la tranquilidad del vecindario, pues en otros pueblos de mucha menos importancia que el nuestro no carecen de este necesario elemento.
El escritor aguileño Francisco Martí Hernández escribirá su sentido pesar ante esta perdida
Yo tengo la emoción de una lágrima sincera para esta inesperada tragedia que llena de luto a mi patria chica.
Cuando la campana dio á los vientos su pregón de alarma conmoviose mi alma. Cuando vi la tragedia advertí que el humo, negro y denso, se me entraba por los ojos camino del corazón.
La siniestra lumbrarada puso en mi rostro una roja pincelada de color.
Era indignación y la pena que a mi rostro subían en oleadas de sangre.
Era mi protesta desesperanzada; el dolor reservado, íntimo y mudo que conmueve nuestro espíritu cuando vemos que mueren las cosas amadas y que no podernos atajar el mal...
* * *
¡Adiós Balneario! ¡Adiós teatro España!
Son mis palabras como un rezo suave, como una plegaria, como un lloro, como una resignada lamentación. Son mis palabras como un puñado de lágrimas que se cuajaron y se hicieron rosas de amor y con ellas hacemos una ofrenda triste.
Aquí tienes mi ofrenda, querido Balneario y querido teatro España. Ofrenda de cariño; ofrenda de afecto; ofrenda de gratitud porque en vosotros hay recuerdos, de toda mi vida.
En años de la niñez cuando correteando por las playas vi que clavaban los primeros raíles sobre los que os alzasteis más tarde.
Horas del atardecer cuando el alma se remontaba hasta los bordes de los cielos y acodado en el barandal del Balneario miraba melancólico la risa de las olas. Horas del medio día, horas de pereza, en días estivales cuando escuchaba la alegre música del vals de moda y tenía al alcance de mi mano la copa de fresca cerveza. Horas de todo él día; en meses de verano, cuando la rubia amiga vestidita de blanco paseaba por el salón y sus ojos traviesos y acariciadores miraban y reían, para que la boca no riera.
Recuerdos de toda la vida, de toda nuestra vida. De niños, de hombres ¡cuántos recuerdos tienen los aguileños del Balneario España..!
Y ¡cuántos recuerdos tienen de su lindo teatrito!-Una noche era la gentil tonadillera. Veo la sala resplandeciente. Un lleno completo.
Una ovación ensordecedora y la vocecita de cristal y plata que dice suavemente acariciadora Mimí es una gentil cocott de moda hoy en París ....
Otra noche el eminente actor Francisco Morano deleita nuestro espíritu y nos hace gustar bellas emociones de arte.
Por todo esto ¿qué aguileño no llorará la desaparición del teatro y del Balneario España? Yo estoy cierto de ello. Sé que la pena es de todos y que todos somos hermanos que lloramos la pérdida. Sobre nuestros corazones de buenos aguileños llevamos estos días un crespón negro en señal de sentimiento. Yo sé que amamos nuestros recuerdos y queremos a nuestra patria chica, y que por nuestro dolor, y por la pérdida que representa para Águilas esto, son tantos nuestros suspiros que si las cenizas de nuestro querido Balneario y nuestro querido teatro España no fueran tan pesadas, el aire de esos suspiros nuestros remontaría a esas cenizas y las haría volar, camino de los cielos, como una triste bandada de negras mariposas.
Había acabado una etapa en la historia de la vida de los aguileños, que coincidirá con el fin del periodo conocido como “Belle epoque” donde sucede un importante cambio social al hacerse menos severa las normas sociales, produciéndose una relajación de costumbres. El Balneario será sustituido por El Reina Victoria Eugenia en el mismo emplazamiento, inaugurándose durante el verano de 1914.